19/12/2024
El Ayuntamiento de Zarautz ha completado el desarrollo del área del humedal de Irita, uno de los puntos de mayor interés del Anillo Verde Azul, con la instalación de un jardín muy especial. Se trata de un jardín con un diseño en forma de mariposa que cuenta con 30 especies diferentes de plantas especialmente atractivas para los insectos que polinizan las flores, contribuyendo con ello a proteger la biodiversidad. Especies como la lavanda, la melisa, el espino albar, la menta, el orégano, la salvia, el saúco… en total, se han plantado 436 plantas que crecerán formando un bonito jardín. Se ha vallado, sobre todo, para impedir que entren los perros y así proteger las plantas sembradas.
“Al instalar este jardín, además de favorecer la biodiversidad pretendemos sensibilizar sobre la importancia de proteger tanto las plantas en nuestros barrios y jardines como los insectos polinizadores”, señala la concejala responsable del Anillo Verde Azul, Gloria Vazquez (PSE-EE). “También instalaremos en este mismo espacio un panel explicativo y un hotel de insectos, una estructura de madera que está empezando a ser común en muchas ciudades para favorecer el desarrollo de polinizadores y su supervivencia invernal”.
Los insectos polinizadores más conocidos y apreciados pertenecen a los grupos de las abejas (himenópteros) y mariposas (lepidópteros), pero también son importantes polinizadores las moscas (dípteros) y los escarabajos (coleópteros). Todos ellos son imprescindibles para polinizar las flores y favorecer su reproducción, tanto que la desaparición de estos insectos pondría en grave peligro los ecosistemas terrestres. Al alimentarse de néctar y polen, mueven el polen de una flor a otra lo que hace posible su reproducción.
Cerca del 75% de las plantas que cultivamos dependen de los polinizadores, con lo que incluso nuestra economía y nuestra salud se verían gravemente afectadas sin ellos. Pero es mucho más importante aún, ya que, sin insectos, la vida en la Tierra sería prácticamente imposible. La flora y la fauna tal y como las conocemos se verían alarmantemente afectadas.
Sin embargo, las cifras muestran que el 41% de los insectos está en declive. El 30% está amenazado y su extinción es ocho veces superior a la de los vertebrados. Si muchas de estas diminutas criaturas desaparecieran, las consecuencias serían catastróficas.
“Los científicos consideran que la causa más importante es la destrucción de los hábitats naturales debido a la urbanización. Pero las amenazas van desde la deforestación, el cambio climático y las especies invasoras, hasta la agricultura industrializada e incluso la contaminación lumínica. La costumbre de mantener el césped al ras evitando el desarrollo de las flores impide también el desarrollo de los polinizadores y con ellos de los pájaros. Las ciudades pueden ser lugares ricos en biodiversidad, mucho más vivas y saludables. Con este pequeño jardín queremos mostrar la importancia y la riqueza de la biodiversidad para la ciudad. Os animo a visitarlo y de paso, si observáis el río, quizás podáis ver a algún Martín pescador”, añade Vazquez.
