El río Iñurritza ha ido mejorando su calidad en los últimos años permitiendo que korrokones y tortugas vivan en sus aguas. Estos días un bandada de quince patas se dejan ver cerca del colegio Orokieta. Pero lo más asombroso fue ver la semana pasada un pequeño conejo saltando a gran velocidad para escapar de dos municipales que pretendían atraparlo.